Democratizado. Repartido. Impulsado por decisiones. Bienvenido al nuevo futuro de datos de los fabricantes.

Durante 30 años, los fabricantes se han centrado en mejorar el rendimiento operativo mediante la optimización de sus sistemas y procesos. Con considerable éxito, también. Durante ese tiempo, la industria se ha vuelto asombrosamente efectiva y eficiente para llevar al mercado productos asequibles y de alta calidad.

Esta capacidad, por supuesto, seguirá siendo vital. En un mundo en el que aumentan las expectativas de los consumidores en cuanto a precios, entregas y personalización, poner los productos correctos en manos de los clientes cuándo y cómo los quieren es cada vez más importante para la competitividad de cualquier empresa manufacturera.

Pero ahora hay una diferencia importante. En lugar de estar impulsada por procesos más eficientes y costos más bajos, la fuerza impulsora detrás de la próxima etapa de mejoras operativas de la industria será la tecnología. Y, especialmente, la evolución de los datos y la analítica.

Un cambio dramático

La buena noticia es que muchas empresas manufactureras ya están considerando cómo integrar los datos en toda su organización, como lo demuestra recientemente EY Horizonte tecnológico estudio confirmado. También existe una creciente evidencia de que los efectos positivos de la centralización de datos sin interrupciones contribuyen a los resultados de fabricación.

Sin embargo, aunque ciertamente se están produciendo cambios, muchos fabricantes no se están moviendo con la suficiente rapidez o de manera holística. Para aprovechar al máximo el potencial transformador de los datos, la industria debe experimentar un cambio drástico tanto en la mentalidad como en la inversión. Atrás quedaron los días de ver los datos como algo "propiedad" del departamento de TI y de enfocar el gasto digital en la planificación de recursos empresariales (ERP) y los sistemas de ejecución de fabricación (MES) empaquetados.

En cambio, las empresas deberían comenzar a construir plataformas de datos distribuidas que permitan a cada empleado acceder y analizar la información en tiempo real que necesitan para innovar, resolver problemas y tomar mejores decisiones.

Ganancia a corto plazo, transformación a largo plazo

Para los fabricantes, los beneficios a corto plazo de hacerlo serán considerables, permitiéndoles reunir mercados, clientes y empleados en un único flujo fluido de valor digital. En particular, proporciona el trampolín para respuestas más dinámicas a los cambios en su panorama operativo, desde patrones de demanda de los consumidores en evolución y problemas de suministro inesperados hasta eventos globales de cisne negro como la pandemia de coronavirus y la guerra en Ucrania.

La democratización de sus datos también permite a las empresas ser más proactivas y personalizadas en la forma en que interactúan con los clientes a través de sus canales de ventas y servicios. Y les ayuda a mantener una imagen más precisa de la gestión y el rendimiento de la producción, lo que aumenta el rendimiento en áreas como la gestión de residuos, la logística y el control de calidad.

Sin embargo, es a largo plazo donde el potencial de este enfoque moderno de datos distribuidos se convierte en un verdadero cambio de juego. Esto se debe a que abre la puerta a tecnologías más avanzadas como los gemelos digitales y la realidad aumentada que, a su vez, permiten a las empresas ir más allá del simple análisis de lo que ya sucedió para predecir de manera proactiva lo que está por suceder.

Dicho de otra manera, las empresas pueden pasar de manejar datos a manejar decisiones, determinando de antemano la mejor manera de responder a las oportunidades y amenazas y reconfigurando positivamente todo, desde patrones de producción y niveles de inventario hasta asociaciones con proveedores y gestión de riesgos.

Hora de un poco de magia

Al igual que con cualquier proyecto de transformación importante, la creación de este entorno es un proceso continuo. La clave para los fabricantes es actuar ahora para construir una base escalable para hacerlo.

Eso comienza con el cambio de la mayor cantidad posible de sus procesos de datos a la nube, pasando del enfoque local fragmentado tradicional a algo mucho más integrado y accesible. Luego, también pueden comenzar a maximizar herramientas como la visualización de datos y el análisis de correlación para modelar procesos complejos, probar hipótesis y afinar la toma de decisiones.

Los cambios también van más allá de la propia tecnología. Los fabricantes deben reconsiderar las personas, los roles laborales y las habilidades que necesitan para prosperar – no solo en el piso de producción sino en todo el negocio. En lugar de ver solo ciertos roles, procesos y funciones dentro de la empresa como "basados ​​en datos", todos deben estar equipados con las tecnologías y la capacitación necesarias para desarrollar sus capacidades digitales y poner los conocimientos en el centro de su trabajo.

Como dijo una vez el renombrado científico y futurista Arthur C. Clarke: “Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia”. Para los fabricantes que buscan aprovechar décadas de mejoras operativas y obtener una ventaja competitiva renovada, adoptar un enfoque democratizado y distribuido de los datos debe convertirse en su último truco.

Las opiniones expresadas por el autor no son necesariamente las de Ernst & Young LLP u otros miembros de la organización global de EY.

Fuente: https://www.forbes.com/sites/lisacaldwell/2022/05/16/democratized-distributed-decision-driven-welcome-to-manufacturers-new-data-future/